El encaje de bolillos es una técnica de encaje textil que consiste en entretejer hilos que inicialmente están enrollados en bobinas, llamadas bolillos, para manejarlos mejor. A medida que progresa el trabajo, el tejido se sujeta mediante alfileres clavados en una almohadilla, que se llama "mundillo". El lugar de los alfileres normalmente viene determinado por un patrón de agujeritos en la almohadilla, también conocido como "picado".
Muchos tipos de encaje se inventaron durante la época del apogeo del bordado, entre 1500 y 1700, antes de que las máquinas bordadoras automáticas estuvieran disponibles. La reaparición del bordado es un fenómeno reciente y está considerado una afición. Las encajeras todavía enseñan su arte y venden sus mercancías, aunque su clientela ya no es la nobleza sino el turista curioso.
La Asociación Acerobo ofrece su espacio para recuperar este oficio tan interesante a lo largo del año. Ofrecemos un ejemplo de los trabajos realizados en estos talleres.
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