El Tazcaburras para los oriundos es un plato de curioso nombre perteneciente a la cocina manchega, aunque su influencia se extiende hasta Las Alpujarras. Es un guiso muy antiguo, tradicional de la sierra, muy nutritivo y no apto para estómagos débiles o delicados.
Cuenta la leyenda que el atascaburras surgió de una gran nevada en la que dos pastores atrapados en ella no tenían nada que comer excepto patatas y raspa de bacalao. Lo cocieron añadiendo aceite de oliva, engordando la mezcla y tras la comilona dijeron "esto harta hasta las burras", de ahí el nombre.
Existen gran cantidad de variantes pues en cada lado se echaba lo que se tenía a mano. Nosotros vamos a realizar la receta de la vecina Dolores.